21 febrero 2005

Saturday, Ian McEwan, 2005 - Part I

Babeo con el libro que tengo entre las manos. La última novela de Ian McEwan, Saturday. No lo he empezado y creo que voy a posponer su inicio unos días más; es todo un placer esa sensación de saber que tienes por delante el mundo de Ian McEwan sólo para tus ojos, esperándote. Aunque el que ahora nos trae tan sólo dure un día: un sábado cualquiera, y sea además el mundo de todos nosotros, occidentales diletantes, ingratos e idiotas. Iré poco a poco. Por el momento, me contento con leer y releer la cita que inicia la novela... Es un extracto de una novela de Saul Bellow, Herzog, de 1964. ¿1964?...y 2005 también (traducción del extracto de Bellow más abajo)

For instance? Well, for instance, what it means to be a man. In a city. In a century. In transition. In a mass. Transformed by science. Under organised power. Subject to tremendous controls. In a condition caused by mechanization. After the late failure of radical hopes. In a society that was no community and devalued the person. Owing to the multiplied power of numbers which made the self negligible. Which spent military billions against foreign enemies but would not pay for order at home. Which permitted savagery and barbarism in its own great cities. At the same time, the pressure of human millions who have discovered what concerted efforts and thoughts can do. As megatons of water shape organisms on the ocean floor. As tides polish stones. As winds hollow cliffs. The beautiful supermachinery opening a new life for innumerable mankind. Would you deny them the right to exist? Would you ask them to labor and go hungry while you yourself enjoyed old-fashioned Values? You -you yourself are a child of this mass and a brother to all the rest. Or else an ingrate, dilettante, idiot. There, Herzog, thought Herzog, since you ask for the instance, is the way it runs.

[Saul Bellow, Herzog, 1964]

[Traducción: "¿Por ejemplo?, Bueno, por ejemplo lo que significa ser un hombre. En una ciudad. En un siglo. En transición. Entre la masa. Transformado por la ciencia. Bajo un poder organizado. Sujeto a tremendos controles. En una condición causada por la mecanización. Tras el último fracaso de las esperanzas radicales. En una sociedad que no es comunidad y que devalúa a la persona. Deudora del poder multiplicado de los números que convierten al individuo en prescindible. Que gasta billones militares contra enemigos extranjeros pero que no pague por el orden en casa propia. Que permita el salvajismo y la barbarie en sus propias grandes orbes. Al mismo tiempo, la presión de los millones  de humanos que han descubierto lo que esfuerzos y pensamientos en consonancia pueden llegar a hacer. Como megatones de organismos con formas acuáticas en el fondo de los océanos. Como las mareas pulen las piedras. Como los vientos soplan en las colinas. La hermosa supermaquinaria abriendo vida nueva a una humanidad innumerable. ¿Les negarías el derecho a existir? ¿Les pedirías que trabajasen y pasaran hambre mientras que tú mismo disfrutas de Valores pasados de moda? Tú -tú mismo eres un hijo de esta masa y un hermano de todo el resto. La alternativa es ser un ingrato, un diletante, un idiota. Eso es, Herzog, pensó Herzog, ya que pides un ejemplo, así es como funciona.]

No hay comentarios: